Comparte nutricionista claves para cuidar tu salud sin contar calorías

TRENTON, Nueva Jersey, EU, 10 de agosto de 2025.- Enfocarte en el peso y tener una alimentación restringida no es la forma correcta de mantenerte saludable, así lo considera la nutricionista Luisana Ferrer, quien aboga por un método más permisivo en el que la prioridad sea buscar hábitos saludables y tener una buena salud tanto física como mental.
Durante entrevista con Quadratín Hispano la especialista en obesidad explicó que se ha alejado un poco del método tradicional y se ha enfocado más en los buenos hábitos.
“Yo tenía un método tradicional en el que pesaba a las personas y les tomaba sus medidas de composición corporal y el enfoque era en eso, en bajar la grasa, aumentar masa muscular y aunque no era una forma restrictiva como tal, al final había una restricción calórica, y mientras haya eso, habrá restricción. Entonces me enfoqué en los hábitos, porque es que hay cuerpos que están diseñados para ser más grandes y hay que hacer las paces con eso también”, explicó la especialista.
Ferrer enfatizó que no está en contra de la pérdida de peso, pero con lo que no está de acuerdo es con perder peso por medios restrictivos.
“Si al final tuviste que restringir tu cuerpo y someterlo a restricciones severas para llegar a un peso, realmente no era el peso saludable para tu cuerpo, entonces, ¿qué les propongo yo a mis pacientes? cambiar los hábitos, y si hay una pérdida de peso como consecuencia del cambio de hábitos, ya eso es otra cosa”, destacó la experta.
Y señaló que existen verdaderos indicadores de salud más allá del peso. “Bajar de peso lo puede hacer cualquier persona con cualquier método, pero verdaderos indicadores de salud pueden ser otros, como tu energía en el día, cómo está tu ciclo menstrual en el caso de las mujeres, cómo está la salud de la piel, las uñas, si el pelo está fuerte o quebradizo, si ya no hay estreñimiento, si no hay malestar a nivel gastrointestinal, si ya no hay hinchazón, cómo están tus exámenes de laboratorio, los resultados”, indicó.

Además, resaltó la importancia de acudir con un nutricionista para tener un plan ideal para sus necesidades.
“Los objetivos y las necesidades de cada paciente son diferentes. Hay pacientes que tal vez el objetivo sea que ya no quieren sentir tantas molestias a nivel gastrointestinal, entonces nos vamos más por ahí, o hay otros que quieren reconectarse con sus señales de hambre y saciedad, entonces nos vamos por ahí, a cada paciente hay que escucharlo. Las estrategias no son las mismas, ni los recursos, ni las actividades o tareas que hacemos en consulta son las mismas para todos”, detalló.
También recomendó no satanizar los alimentos, pues indicó que eso solo perjudica.
“Todos vivimos en una sociedad inundada de cultura de dieta, en la que solamente con abrir las redes sociales tenemos cualquier mito o cualquier satanización de cualquier alimento. Entonces, yo creo que la clave es buscar educarte de una forma sana”.
Y es que indicó que en algunas ocasiones esas restricciones generan angustia, estrés o ansiedad.
“Es importante una educación nutricional de profesionales que no se dediquen a restringir, sino más bien a enseñar al paciente a que al final puede comer de todo mientras sea en balance”, enfatizó.
En cuanto a cuándo se debe acudir a un nutricionista, la especialista indicó que aconseja hacerlo desde niños.
“Para mí es ideal que los niños vayan a un nutricionista, pero que sea un nutricionista no enfocado en el peso, porque si le vamos a hacer enfoque en el peso a un niño desde los siete años estamos sembrando una semilla de un trastorno de la conducta alimentaria, pero si es un nutricionista realmente enfocado en cambio de hábitos más allá del tamaño del cuerpo y más allá de cómo se ve el cuerpo, entonces sí es una herramienta de oro llevarlos desde pequeños, porque al final sí te van a enseñar y ayudar”, recalcó la también especialista en trastornos de la conducta alimentaria a quien se puede conseguir en las redes como @lavibrasaludable.

Y resaltó que los adultos pueden acudir en cualquier momento que sientan y quieran buscar mejorar sus hábitos alimenticios y aprender a comer, sin temor a ser juzgados, pues es una de las razones por las que asegura que muchos no se atreven a ir con un especialista de la alimentación.
“Las personas no solamente temen que les vaya a juzgar, sino que temen a que no se les vaya a escuchar, ¿en qué sentido? Es que esa persona viene con ciertos hábitos, creencias, y preferencias que se tienen que escuchar. Al final hay que hacer cambios. Pero los cambios deben hacerse también de forma progresiva. Entonces, yo sí creo que he tenido el regalo de que muchos de mis pacientes lleguen a consulta buscando alivio. Buscando que se les ayude con sus problemas. Tú escoges al nutricionista según lo que crees que te puede ayudar o no”, aseguró la experta.