Dedica Rafael Toro 40 años a Goya Foods en servicio a su comunidad

MANHATTAN, Nueva York, EU, 29 de julio de 2025.- Desde hace casi 40 años, Rafael Toro ha sido mucho más que el director de Relaciones Públicas de Goya Foods. Ha sido un puente entre generaciones de inmigrantes y los sabores de su infancia; un portavoz incansable del compromiso social de una de las marcas más queridas por los latinos en Estados Unidos. Su historia es también la historia de cómo una empresa familiar se convirtió en símbolo de identidad, resiliencia y comunidad.
“Yo me siento Goya”, dijo con orgullo. “Representar una empresa latina que cree tanto en su gente me da ánimo cada día”.
El lema que millones reconocen —“Porque si es Goya, tiene que ser bueno”— no es solo un eslogan para Toro. Es una promesa que se renueva cada vez que una familia abre una lata de frijoles, sazona una receta con adobo o encuentra en un supermercado de Nueva York un pedacito de su país.
Durante una conversación con Quadratín Hispano, Rafael compartió que Goya se prepara para celebrar sus 90 años en 2026.
“Estamos muy orgullosos de ser una empresa latina que desde después de la Segunda Guerra Mundial ha servido a la comunidad hispana. Empezamos con los puertorriqueños y luego, cada vez que llegaba un nuevo grupo, cubanos, dominicanos, mexicanos, colombianos, ofrecimos los productos que sabían a su hogar”.

Una empresa con propósito
El éxito de Goya no se limita a sus productos, también se refleja en su impacto social. A través de Goya Gives, la empresa ha apoyado más de 300 organizaciones comunitarias en todo el país, y ha donado millones de libras de alimentos en momentos de emergencia, como los huracanes Sandy, María y Harvey.
“Para nosotros es fundamental ser parte activa de la comunidad”, subrayó Toro. “Hace poco donamos 100 mil libras de alimentos a 20 organizaciones locales, unimos a las personas en la mesa con nuestros productos, pero también las unimos para ayudar. Cuando gente buena se une, se pueden hacer cosas muy especiales”, dijo Toro.
Además del trabajo local, Goya extiende su ayuda a países de América Latina, incluyendo Colombia, donde apoyan la fundación Hogares Claret. También otorgan becas universitarias, impulsan programas de mentoría con jóvenes huérfanos y promueven iniciativas de educación nutricional.

Una vida dedicada al servicio
Antes de unirse a Goya en 1985, Rafael Toro trabajó en la alcaldía de Boston como enlace con la comunidad hispana, desde entonces, ha construido una carrera marcada por el servicio, el compromiso cultural y la conexión con las raíces.
Entre los hitos que ha liderado destacan la campaña por el 75 aniversario de Goya, con conciertos de Marc Anthony, Ana Gabriel y Marco Antonio Solís, la colaboración con la Casa Blanca y Michelle Obama para lanzar MiPlato, y la inauguración de la estatua de Roberto Clemente en el Bronx.
Durante su participación en la Feria de Negocios Hispanos de Nueva Jersey, Toro fue claro al hablar de la responsabilidad que siente, “cuando nosotros ayudamos a la comunidad, nos ayudamos a nosotros mismos, eso es lo que hacemos desde Goya”.
Un mensaje de esperanza
A lo largo de cuatro décadas, Rafael Toro no solo ha representado a una marca, ha encarnado una forma de servir con propósito y orgullo, su historia inspira porque demuestra que el éxito no se mide solo en cifras, sino en el impacto que se deja en la vida de los demás. Frente a los retos actuales, especialmente para la comunidad inmigrante, Toro insiste en mantener la fe y la esperanza como herramientas poderosas para seguir adelante.
Más allá de los productos, de los eventos y de las campañas, su mensaje es claro, cuando se trabaja con amor, autenticidad y compromiso, es posible construir puentes duraderos entre culturas, generaciones y corazones.
“Si haces lo que amas y lo haces con fe, siempre vas a encontrar una forma de ayudar y de dejar huella. Hay que tener fe en Dios y en uno mismo, porque nada se queda igual para siempre, las cosas cambian, y hay que creer que van a cambiar para bien, cuando uno hace su trabajo con amor y con ganas de ayudar, siempre se pueden lograr cosas especiales”, concluyó.