Libros de ayer y hoy

Niños. Enfrentemos los golpes, con la paz de la vida
México y todos los países que se oponen a las guerras, deben ser enérgicos en la defensa de la paz. Luchar para impedir que una guerra se instale, porque a partir de esa, puede venir el caos. Los barruntos de golpe en Venezuela, nos pronostican muchas cosas. No solo la embestida infame a un país que busca ser feliz. Esa embestida puede llevar a la defensa de ese país, de parte de países amigos. De respuestas directas del agresor a los países amigos y como consecuencia, la respuesta de éstos directamente al país atacante. Con una suma por ambos lados, de países que defienden la cercanía con el atacante y el defensor. Y así, la guerra va escalando en compromisos, hasta crear una guerra mundial. Este simple recorrido y que desde luego todos lo hemos pensado, nos lleva a una conclusión inmediata: México puede llegar a estar en guerra, sin haber intervenido directamente. La amenaza que está complementando Donald Trump desde hace semanas, -y desde que estuvo en su primer período-, nos puede involucrar a todos, aún opositores a esa violencia, en una guerra mundial.
MIENTRAS LA VIOLENCIA SE ORGANIZA, BUSQUEMOS PAZ A TODO TRANCE
En este momento, la Organización de Estados Americanos (OEA), ya debería de estar al alza para impedir la agresión del golpe en Venezuela. Pero parece imposible, porque el mismo organismo servil a Estados Unidos, ha empujado golpes, como lo vimos en Bolivia con la golpista Jeanine Añez. Todos los países del mundo, en especial los de América están en peligro. Y más los de América del sur y los más cercanos a Estados Unidos, México y Canadá. Sería la hora de que todos esos países estuvieran en este momento alertas y exigieran públicamente, aunque parezca imposible, que las amenazas de guerra se suspendan. México ya lo ha hecho al rechazar la intervención y el injerencismo en los países ajenos. Pero no hemos visto un clamor unido de esos países, aparte de México y Cuba que ya hicieron pública su postura y otros más. Pero la gran mayoría de los de América, uncidos a una OEA, se aprestan en el silencio para salir serviles después, a lanzarse sobre Venezuela. Insistimos en dos casos que nos han sorprendido, porque eso se refleja a favor del imperio: la postura de Gustavo Petro en Colombia y de Bernardo Arévalo en Guatemala, para darle el abrazo de aprobación a la golpeadora María Corina por el premio Nobel de la Paz. Eso es darle el apoyo a Trump.
L A PAZ NOS CONFIGURA VIDA. PENSEMOS SOBRE TODO EN LOS NIÑOS
La guerra que aún sigue en Palestina pese a los llamados acuerdos de paz, nos muestra como lo más sensible, la vida de los niños, fue lo que más buscó el agresor. Seres que no tienen ninguna culpa en los conflictos. En estas reflexiones uno llega a lo más sencillo, a las cosas que producen alegría a esos niños, y la búsqueda de que eso sea permanente. En Sonora por ejemplo, hay un grupo numeroso de escritores, algunos egresados de su universidad la UNISON, que se han dedicado entre otros escritos, a crear libros para niños. Algunos ya los hemos comentado, pero ahora les menciono cuatro de ellos de ellos, De cuando fuimos a la luna, de Roberto Corella, El gatito travieso, de Laura Delia Quintero García, Katy y el hada que vivía en la cajita de colores, de Juan Diego González y La nueva vida del zapato, de Felícitas Valle López, todos ya expuestos desde 2020, por la Editorial Sonora Queherida. En el último título se trata del caso de un zapato que fue envejeciendo en diferentes pies y como al final es rescatado de ir a la basura, pintado y puesto en el jardín, como un florero. Y el anterior de una niñita que tenía una cajita, en donde descubrió que vivía una pequeña hada de la que se hizo amiga y a la que llevaba escondida a la escuela en su cajita y con la que vivió felizmente desde entonces. Que sencillez y que belleza, tiene la paz.