Incrédulos están los neoyorquinos frente a la cámara antirruido

MANHATTAN, Nueva York, EU, 22 de septiembre de 2025.- Caminar por las calles de Nueva York significa lidiar con diferentes desafíos, desde tropezar con una persona que va en dirección opuesta a la nuestra hasta aguantar los ruidos provocados por conductores estresados que desean pasar de primero en una intercesión, o simplemente aprovechar una luz verde del semáforo para llegar con tiempo a su destino.
Ante el incremento de llamadas a la línea de atención 311, el Departamento de Protección Ambiental, DEP, de la ciudad de Nueva York confirmó el cumplimiento de la Ley local que aprueba cámaras antirruido. Se trata de un dispositivo electrónico capaz de detectar la cantidad de ruido que produce un vehículo en especial, logrando así que una vez superado los decibeles permitidos, el conductor infractor reciba una multa que iría de 800 a dos mil 500 dólares.
Pese a que las autoridades de la ciudad han manifestado que la Ley fue aprobada en 2024, y que aseguran haber impuestodos mil 37 sanciones lo que significa en dinero más de un millón de dólares, la comunidad asegura que esto es improbable que avance, pues dicen que los números son altos, pero los niveles de ruido continúan en la ciudad.
Desde Quadratín Hispano hicimos un sondeo en la Quinta Avenida, una de las principales arterias viales de la ciudad y en donde el ruido es más prolongado y la comunidad y conductores dicen no tener conocimiento al respecto, pero, peor aún afirman que el déficit de recaudo afirmado por las autoridades seguirá en aumento, debido a que es imposible silenciar a la ciudad que nunca duerme.
Hasta la fecha, las autoridades han logrado recolectar un poco más de 610 mil dólares, sin embargo, el porcentaje de multas impagadas se mantiene por encima del 30 por ciento.
En caso de que esta propuesta antirruido sea adoptada rigurosamente, la ciudad de Nueva York quedaría en silencio, afectando en gran medida sectores como los gastronómicos, bares y los carricoches que transportan turistas con música alta por Times Square.