Exigen en Foley Square que Nueva York ponga fin a la colaboración con ICE

Nueva York, EU, 2 de junio de 2025.- A solo unos pasos del lugar donde agentes de ICE detuvieron recientemente a varios inmigrantes —incluyendo a un pastor que observaba una audiencia en la corte— un grupo de personas se congregó esta mañana en Foley Square para alzar la voz contra lo que calificaron como “secuestros” promovidos por la colaboración de las autoridades locales con el Servicio de Inmigración y Control de Aduanas ICE.
Legisladores estatales, defensores de derechos humanos y organizaciones comunitarias se unieron para exigir la aprobación de dos proyectos de ley clave: New York for All y Dignity Not Detention, con los que buscan poner fin a la complicidad de agencias estatales y municipales, como el NYPD, en operativos migratorios. La primera impediría específicamente que funcionarios estatales cooperen con autoridades migratorias, y la segunda prohibiría los contratos con centros de detención privados.

El evento fue liderado por la senadora Julia Salazar, promotora de Dignity Not Detention, y contó con la participación de las asambleístas Marcela Mitaynes, Claire Valdez, Emily Gallagher y Phara Souffrant Forrest, junto a la senadora Kristen González.
También estuvieron presentes representantes de Make the Road New York, Bronx Defenders, la New York Immigration Coalition, Mixteca y el capítulo neoyorquino de los Socialistas Democráticos de América.
Durante la manifestación, los asistentes corearon al unísono “¡Sí se puede!” y “¡Aquí estamos y no nos vamos!”, en un acto de resistencia colectiva que reflejó la urgencia del momento. Entre ellos, Luba Cortés, organizadora de derechos civiles en Make the Road New York.
“Estamos apoyando la legislación de Nueva York para todos, queremos que los neoyorquinos se sientan a salvo, que no se sientan perseguidos por inmigración, que el dinero del Estado no sea usado para ayudar a detener a las personas, que inmigración no entre a lugares como escuelas o lugares que son parte del gobierno estatal y así prevenir que haya estas persecuciones contra la comunidad inmigrante. Hemos visto muchos casos en Long Island, de actividad de ICE, los vemos afuera de las escuelas, deteniendo a familias, personas que no tienen ningún récord criminal deteniéndolas” dijo Cortés.

Uno de los casos que más conmoción generó fue el de Dylan Josué López Contreras, un estudiante venezolano de 20 años inscrito en ELLIS Prep Academy en el Bronx. El pasado 21 de mayo, Dylan fue detenido por ICE en el vestíbulo del tribunal de inmigración en Manhattan, justo después de que su caso fuera desestimado por un juez. A pesar de estar legalmente en el país y no tener antecedentes, fue puesto en proceso de deportación, su historia fue citada como un ejemplo claro del impacto devastador de la colaboración entre agencias locales y autoridades migratorias.
Las palabras de la asambleísta Marcela Mitaynes fueron especialmente sentidas, recordando la urgencia de proteger a las comunidades más vulnerables frente a los abusos de poder.
“Nuestra gente tiene mucho miedo. Estamos viendo que en las escuelas hay menos niños, los dueños de negocios se están quejando porque sus trabajadores tienen miedo, la gente no está yendo a los restaurantes ni a los mercados. Y esto no solo ocurre aquí, también en Upstate la gente está empezando a desaparecer, porque tienen miedo, mucho miedo. Es importante entender que mucha de nuestra gente ya está traumada; estoy preocupada por nuestra gente de la tercera edad y, más que todo, por los niños que están viendo, escuchando y tienen miedo porque no saben qué va a pasar y la verdad es que en este momento tenemos una oportunidad de actuar e implementar las protecciones que son tan necesarias ahora”, afirmó la asambleísta Mitaynes.

Con solo diez días restantes en la actual sesión legislativa, los organizadores y legisladores hicieron un llamado urgente a sus colegas en Albany para que actúen de inmediato. Advirtieron que, de no aprobarse New York for All y Dignity Not Detention antes del cierre del periodo, el estado continuará siendo cómplice de las detenciones arbitrarias y el sufrimiento de miles de familias inmigrantes.
Nueva York es un estado santuario
Los manifestantes recordaron que Nueva York se considera un estado santuario, pero que en la práctica aún permite la colaboración con ICE, perpetuando el miedo en comunidades inmigrantes. Desde Foley Square, reiteraron que no habrá justicia mientras se siga permitiendo que agencias locales sirvan de brazo ejecutor para las políticas migratorias federales.
El evento concluyó con una emotiva oración liderada por una representante de Interfaith Center of New York, quien invocó protección para las familias migrantes y justicia para las comunidades vulnerables. Lejos de terminar en silencio, el cierre estuvo marcado por vítores, aplausos y consignas como “¡Aquí estamos y no nos vamos!”, mientras los asistentes reafirmaban su compromiso con la lucha por los derechos de los inmigrantes.