Acceder a una vivienda en Nueva York entre esperanza y realidad

NUEVA YORK, EU, mayo 1 de 2025.- En una ciudad donde más de 350 mil personas carecen de un hogar estable, según la Coalición para las personas sin hogar de Nueva York, las loterías de vivienda ofrecen una chispa de esperanza en medio de una crisis habitacional persistente. Sin embargo, para muchos neoyorquinos, el proceso resulta largo, complejo y, a menudo, frustrante.
Rosa Pérez, una inmigrante guatemalteca residente en Queens, lleva más de cinco años esperando ser seleccionada en la lotería de vivienda de Nueva York. A pesar de la larga espera, mantiene viva la esperanza, inspirada por conocidos que han logrado obtener una vivienda a través de este sistema.
“Yo apliqué hace mucho y nada, sigo revisando en el computador, yo sigo esperando, pero no pierdo la esperanza. Conozco gente cercana que lo ha conseguido”, afirma.
Para acceder a estas unidades, los solicitantes deben registrarse en NYC Housing Connect, NYC Housing Connect el portal oficial de loterías de vivienda de la ciudad. Aunque la plataforma ha mejorado con el tiempo, el proceso sigue siendo complicado para muchas personas, especialmente adultos mayores e inmigrantes.
Es por ello por lo que, en un esfuerzo conjunto entre el Departamento de preservación y desarrollo de vivienda HPD de Nueva York y organizaciones sin fines de lucro, se implementó el programa Embajadores de vivienda, creado por el propio HPD. Este programa capacita a personal y voluntarios para brindar asistencia gratuita a quienes desean postularse a las loterías de vivienda asequible.

Organizaciones como Churches United For Fair Housing CUFFH y HANAC, desempeñan un papel crucial en este proceso, ayudando a comunidades vulnerables que enfrentan barreras tecnológicas o lingüísticas entre otras.
Ana Nunez, subdirectora de servicios de CUFFH, enfatiza que uno de los errores más comunes es pensar que basta con aplicar una sola vez.
“No es fácil, pero no es imposible. Hay esperanza. Uno tiene que ser consistente con las aplicaciones, no perder las esperanzas y ser persistente”, asegura. “Y también estar preparado para entregar documentos varias veces. Hay que tener todo en orden: pagos, impuestos, recibos. Si no, el proceso se retrasa”.
Nunez también aclara un punto clave: el estatus migratorio no es un impedimento, siempre y cuando la persona pueda demostrar que ha pagado impuestos.
“No se descalifica a alguien por su estatus migratorio. Se descalifica cuando no entrega los impuestos como comprobante”, enfatiza.
Desde HANAC, la ayuda se enfoca especialmente en adultos mayores. Anjali Zacharopoulos, directora del programa de Alquileres de HANAC, explica que brindan acompañamiento desde el registro inicial hasta la aplicación individual a cada proyecto de vivienda.
“La mayoría de nuestros clientes son adultos mayores y luchan con la tecnología, pero hacer todo en línea es la manera más rápida de guardar documentos y enviar aplicaciones a tiempo”, señala. “Creamos un perfil para ellos, que sirve como base para aplicar a loterías individuales según su nivel de ingresos.”
Zacharopoulos también hace énfasis en la estrategia de aplicar a todas las opciones posibles.
“Mucha gente quiere quedarse en su vecindario, lo entendemos. Pero como es una lotería y no hay garantía, les recomendamos aplicar en tantas zonas como puedan para aumentar sus posibilidades”, añade.
Una confusión frecuente es el término vivienda asequible. Según la directora de HANAC, el concepto puede ser confuso.

La gente piensa que vivienda asequible significa barata, pero para el gobierno significa que no pagues más del 30% de tu ingreso. Eso puede aplicar tanto para quienes ganan 30 mil como para quienes ganan 100 mil dólares o más. Todo depende del programa que haya escogido el edificio”, explica.
Paradójicamente en la ciudad hay una vasta oferta de unidades de vivienda sin ocupar, para aprovechar estas y que puedan ser habitadas en corto plazo, el Departamento de vivienda HPD implementó una medida temporal que permite a los propietarios anunciar directamente unidades de re-renta en plataformas como StreetEasy o Craigslist, sin necesidad de pasar por el sistema de lotería de Housing Connect.
Sin embargo, defensores de la vivienda asequible advierten que, sin auditorías y regulaciones claras, esta medida podría abrir la puerta a prácticas discriminatorias. HPD ha indicado que supervisará el proceso para garantizar una asignación justa y transparente de las unidades.
En este contexto, mientras el Departamento de vivienda y organizaciones comunitarias redoblan esfuerzos para aliviar la crisis habitacional, las loterías de vivienda continúan siendo una herramienta valiosa pero limitada. Para muchos, representan la única vía legal hacia una vivienda segura; para otros, una promesa que aún no se materializa. Mientras tanto, miles de neoyorquinos siguen aplicando, con la esperanza de que su número sea el próximo en ser seleccionado y, con él, una oportunidad para comenzar de nuevo.