Condenan al Jesús siberiano en Rusia por dañar a sus seguidores

TRENTON, Nueva Jersey, EU, 1 de julio de 2025.- Sergei Torop, conocido por sus miles de seguidores como Vissarion o el Jesús siberiano, ha sido condenado a 12 años de prisión en un campo ruso. El expolicía de tránsito, quien afirmaba ser la reencarnación de Jesucristo, fue hallado culpable de causar daño físico y económico a sus adeptos mediante coerción psicológica.
Torop, de 64 años, fundó la Iglesia del Último Testamento en 1991 en una remota región de Siberia, atrayendo a seguidores en una época de gran inestabilidad en Rusia.
Junto a Torop, dos de sus asistentes, Vladimir Vedernikov y Vadim Redkin, también recibieron condenas de 12 y 11 años respectivamente. Los tres fueron arrestados en 2020 durante una redada en helicóptero que involucró al servicio de seguridad FSB, sucesor del KGB. Mediante una investigación determinaron que los líderes de la secta causaron daño moral a 16 personas y perjuicios a la salud física de otras siete.
Manipulación y control
Torop, un místico autoproclamado con barba y cabello largo, instruía a sus seguidores a abstenerse de carne, tabaco, alcohol y malas palabras.
Además, les ordenaba abandonar el uso de dinero, mientras él mismo extraía fondos mediante presión psicológica. La secta operaba desde un asentamiento conocido como la Morada del Amanecer o Ciudad del Sol, donde miles de personas vivieron bajo sus estrictas reglas. La condena pone fin a más de tres décadas de liderazgo de una secta que, bajo la promesa de una nueva vida, terminó dañando gravemente a sus miembros.