Declaran cierre de Gobierno de EU tras estancamiento presupuestario

TRENTON, Nueva Jersey, EU, 1 de octubre de 2025.- El Gobierno Federal de Estados Unidos entró oficialmente en un cierre a la medianoche de este martes, después de que el Congreso no logró aprobar a tiempo una medida de financiamiento para el nuevo año fiscal.
La falta de acuerdo entre demócratas y republicanos, que no ocurría de esta forma desde 2019, provoca la suspensión de la mayoría de servicios federales y deja a trabajadores públicos temporalmente sin sueldo. La Casa Blanca ya ha instruido a las agencias para preparar planes ante posibles despidos masivos.
El estancamiento se produjo por el desacuerdo en temas cruciales, como el aumento a los subsidios de la ley de salud conocida como Obamacare. Esta falta de consenso obligó a suspender una parte de las operaciones del Gobierno, lo que abre una etapa de profunda incertidumbre sobre cuánto tiempo podría durar esta paralización del aparato estatal.
El cierre es una consecuencia directa de que el Congreso no apruebe las leyes de gasto necesarias para mantener financiadas a las agencias federales. La votación clave en el Senado fracasó con un marcador de 55 a 45, sin alcanzar los 60 votos necesarios para que el plan de financiamiento avanzara.
Impacto y consecuencias de la paralización
Este revés legislativo provocará la suspensión temporal de cerca de 750 mil empleados federales bajo licencia (furlough), una licencia temporal sin salario, mientras que otros considerados esenciales deberán seguir laborando sin recibir sueldo hasta que se aprueben los fondos.
Cada dependencia federal cuenta con planes de contingencia que detallan qué servicios se consideran críticos para la vida y seguridad —como defensa, seguridad nacional o respuesta a emergencias— y cuáles se suspenden.
En cierres anteriores se ha visto la clausura de parques nacionales y museos, la suspensión de inspecciones de alimentos y la cancelación de audiencias de inmigración. Asimismo, se han retrasado préstamos federales para pequeñas empresas y compradores de vivienda. Incluso servicios que deben mantenerse, como el control aéreo, se han visto afectados, tal como ocurrió en el cierre de 2018-2019, que fue el más largo de la historia con 35 días.