Revela la ONU: Una mujer muere cada 10 minutos por violencia machista
TRENTON, Nueva Jersey, EU, 25 de noviembre de 2025.- En el marco del Día Internacional de la Eliminación de la violencia contra la mujer, la Organización de Naciones Unidas (ONU) realizó una conferencia de prensa en la que reveló cifras que evidencian una dura realidad y es que los feminicidios van en aumento.
Candice Welsh, Directora de la División de Análisis de Políticas y Asuntos Públicos de la UNODC, reveló que en 2024 unas 50 mil mujeres y niñas fueron asesinadas por sus parejas u otros familiares, según el último informe sobre las estimaciones mundiales de mujeres en pareja, que se centra en los feminicidios relacionados con la pareja y la familia.
“Esta cifra es mundial, lo significa que 137 mujeres y niñas perdieron la vida cada día a manos de alguien de su propia familia y lamentablemente, lo que vemos es que esta cifra global no muestra signos de disminución. Aunque no disponemos de datos globales al respecto, sabemos que, según estimaciones recientes, aproximadamente el 90 por ciento de los homicidios intencionales son cometidos por hombres”, reveló este martes 25 de noviembre durante una conferencia de prensa de la Organización de Naciones Unidas (ONU).
África es la región del mundo donde ocurren más feminicidios
La Directora explicó que estos datos se basan en información que reciben directamente de los Estados miembros a la UNODC, y se complementa con información de fuentes gubernamentales y de ONG, que además evidencia que hay asesinatos por motivos de género en todas las regiones del mundo, principalmente en África.
“África sigue siendo la región con el mayor número de víctimas en términos absolutos, donde el año pasado hubo 22 mil 600 víctimas. Le siguen Asia con 17 mil 400 y América con siete mil 700, Europa con dos mil 100 y Oceanía con 300. Es importante reconocer que se trata de regiones muy extensas, por lo que puede haber grandes diferencias dentro de ellas a nivel nacional o subregional”, mencionó.
A su vez, explicó que al analizar las tendencias a largo plazo del feminicidio, sólo pueden analizar dos regiones: América y Europa, donde hay datos detallados a largo plazo que permiten observar los cambios en los últimos 14 años, de 2010 a 2024. “En estas regiones, podemos observar una diferencia. En Europa, observamos una disminución más marcada de 2010 a 2024. Pero es evidente que este tipo de cambios significativos solo se producen a lo largo del tiempo, lo que refleja que los factores de riesgo y las causas de esta forma de violencia están profundamente arraigados en las normas y prácticas sociales, y que, lamentablemente, los cambios tienden a ocurrir gradualmente”.
Welsh subrayó que casi el 60 por ciento de las mujeres asesinadas son a manos de su pareja u otros familiares, a diferencia de los hombres, que su cifra es mucho menor y solo el 11 por ciento ocurre en el hogar. “Es importante reconocer que, si bien la gran mayoría de los homicidios masculinos ocurren fuera del ámbito doméstico, desafortunadamente para las mujeres, el hogar sigue siendo el lugar más peligroso en términos de riesgo de homicidio”.

La violencia digital también va en aumento
Por otra parte, Sarah Hendricks, directora de la División de Políticas y Asuntos Intergubernamentales de Programas de ONU Mujeres, recalcó que este es el año número 26 en el que las Naciones Unidos y los Estados miembros conmemoran el Día Internacional para la Eliminación de la Violencia contra la Mujer y durante este tiempo las últimas estimaciones revelan una cruda realidad, y es que la violencia contra la mujeres no ha disminuido.
“Para muchas mujeres y niñas, el lugar más peligroso es el hogar. Una mujer o niña muere cada 10 minutos a manos de su pareja o de un familiar. Un dato que me revuelve el estómago, y es el acto final fatal de un continuo acto de violencia visible, pero que a menudo se ignora mucho antes de que una mujer sea asesinada”, expuso Hendricks.
A su vez, resaltó que muchos sistemas aún no registran la profundidad y amplitud de los feminicidios tal como son, por lo que los datos cuentan una historia parcial y no la realidad completa de la violencia que viven las mujeres en el mundo.
“Cuando los asesinatos se registran sin la relación entre la pareja y el agresor, es decir, la relación entre la víctima y el agresor, desaparecen del recuento. Ya no aparecen en los datos. Y en la mayoría de los países, los asesinatos por razones de género que ocurren fuera del hogar no se miden en absoluto. Y esto no se debe a que no ocurran, sino simplemente a que los sistemas actuales no los detectan, no los contabilizan. Las estimaciones que presentamos hoy por la UNODC y ONU Mujeres existen porque insistimos en que existen. Pero la ausencia de datos nos dice algo igualmente importante. Muestra que, donde los sistemas aún no se han adaptado a las realidades que enfrentan las mujeres y las niñas, debemos prestar la mayor atención”, enfatizó.
También destacó que esto es más evidente en el espacio digital, donde los vínculos entre la violencia facilitada por la tecnología y la violencia letal siguen en gran medida sin medirse, y por lo tanto, sin abordarse.
“La violencia digital no está separada de la violencia real. Es la misma violencia, solo que acelerada, amplificada. Vemos a mujeres encuestadas en línea antes de ser atacadas fuera de línea. También vemos imágenes obtenidas mediante coacción que provocan daños letales, y vemos asesinatos de mujeres y niñas transmitidos en vivo en plataformas”, resaltó.

Periodistas son amenazadas en línea
Por otro lado, Hendricks expuso otra realidad y es que indicó que actualmente las periodistas reciben amenazas en línea, muchas de ellas contra su vida y es algo que está empeorando con la Inteligencia Artificial.
"Una de cada cuatro periodistas en todo el mundo son amenazadas y la inteligencia artificial está acelerando este daño, las falsificaciones profundas y el acoso selectivo evolucionan cada vez más rápido de lo que los sistemas pueden seguir el ritmo”, denunció.
A su vez, planteó algunos cambios que pueden modificar esa realidad. “A lo largo de décadas de evidencia, sabemos que la presencia de movimientos de mujeres y organizaciones de derechos de las mujeres fuertes, autónomas y bien financiadas es el factor más crítico que puede impulsar el progreso para erradicar la violencia contra las mujeres. Sabemos que los países con legislación sobre violencia doméstica reportan tasas significativamente más bajas de violencia de pareja (9.5 por ciento), en comparación con el 16,1 por ciento de los países sin tales leyes. Este año hemos visto avances realmente prometedores hacia el progreso. Las leyes fortalecidas en Bélgica y Colombia, las nuevas iniciativas de prevención en Panamá y Costa Rica, y la capacidad de respuesta policial en España y Pakistán, entre muchos otros países, han mejorado”, destacó.
Propuestas y cambios de la ONU para disminuir la violencia contra la mujer
Por lo que indicó que estos cambios demuestran que cuando los gobiernos actúan con intención, decisión y voluntad política, la violencia puede disminuir. “Por eso para poner fin a la violencia contra las mujeres y las niñas hay que poner fin a la violencia digital, ya que la seguridad digital es fundamental para la seguridad de las mujeres, sus derechos y su rol en la vida pública”.
Y dejó claro cómo están trabajando para ello. “Estamos trabajando, garantizando la existencia de marcos nacionales aplicables, fortaleciendo los datos y los sistemas que los recopilan, transformando los ecosistemas digitales y las normas sociales, y apoyando la justicia coordinada, incluyendo la colaboración con el sector policial, los servicios sociales y el sector tecnológico, para que las sobrevivientes puedan acceder a ayuda oportuna y a recursos seguros y eficaces”.
Y expresó “creo que honramos a las mujeres y niñas que no están aquí, que han muerto a causa del feminicidio, al cambiar el futuro y el mañana mediante la construcción de sistemas donde su seguridad sea innegociable, mediante la construcción de sistemas donde la igualdad de género se entienda como la base de la justicia y la paz. Y ese camino hacia ese mundo, si lo elegimos, es uno que creemos que hace de la seguridad una realidad para las mujeres y niñas de todo el mundo”.
