Desafía Trump órdenes judiciales con otra deportación errónea

TRENTON, Nueva Jersey, EU, 20 de mayo de 2025.- La administración de Donald Trump ha reconocido un tercer caso de deportación errónea, involucrando a un migrante gay guatemalteco que, a pesar de contar con protección judicial, fue expulsado del país.
El incidente se suma a una serie de fallos en la agresiva política migratoria del gobierno republicano, que ya había afectado al salvadoreño Kilmar Abrego y al venezolano Daniel Lozano-Camargo, deportados a pesar de tener procesos legales pendientes o de haber recibido órdenes judiciales favorables.
Según los documentos judiciales revelados por El País y Político, el Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE) deportó a O.C.G. —identificado así en el proceso— a México debido a una falla en su base de datos interna. Esta falla habría ignorado su estatus legal y los riesgos que enfrentaba al ser devuelto.
Aunque ICE afirmó que O.C.G. no expresó temor de ir a México, la realidad es que nunca se le preguntó, una omisión que, según el Departamento de Seguridad Nacional, no pudo ser atribuida a ningún oficial.
Un camino de peligros ignorados y desobediencia judicial
La omisión tuvo consecuencias devastadoras para O.C.G.: al llegar a México, fue violado y secuestrado en Iztapalapa, siendo liberado solo tras el pago de un rescate. Posteriormente, pidió ser trasladado a Guatemala, donde ahora vive oculto por temor a represalias. A pesar de que un juez le había concedido protección para evitar ser devuelto a México o Guatemala, ICE ignoró esta decisión, deportándolo y dándole opciones que no eran seguras para él.
El caso de O.C.G. acentúa un patrón de desobediencia institucional y fallas sistemáticas en la política migratoria de la administración Trump.